Hola a todos estos dos últimos días no pude escribir nada ya que estuve trabajando y no tuve apenas tiempo. Si os gusta el blog suscribiros y compartirlo con vuestros amigos, os estaría muy agradecida.
Ahora me voy a dejar de tanto habladuría y comencemos con la historia de hoy.
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Suena el teléfono:
- Juan Luis, te falta el último cuadro para la exposición.Tienes un mes para el cuadro, sabes que si no tienes un mínimo de cuadro no te harán la exposición. (dijo el representante)
- Lo tengo muy claro, pero no puedo hacer más.
Cuelgan el teléfono, Juan Luis va para su taller y se queda sentado sin saber que pintar. De pronto, su hija entró el taller:
- Hola papá ,mira que dibujé
- Déjame mirar.
La pequeña, que tenía 5 años había dibujado una casita, con un pequeño riachuelo.
- Precioso cariño
- Toma papá es para ti.
- Gracias amor.
El padre todo silencioso cogió el dibujo de su hija y lo miró atentamente. De repente, un golpe de inspiración llegó a Juan Luis, comenzó a pintar como si estuviera poseído.
Llegó el día de la exposición, fue un gran éxito, pero el cuadro que más expectación llamó fue su última creación, una pequeña fila de casas, que se reflejaban en un lago. Como curiosidad, justo al lado de su cuadro puso el dibujo de su hija.
-¿En que se inspiró para este cuadro? (Pregunta un reportero)
- En un dibujo de mi hija, ella es mi musa, ella es la que inspira cada uno de mis cuadros.
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Aquí lo dejamos por hoy, espero que os halla gustado. Solo me queda daros las gracias por perder un poco de vuestro valioso tiempo conmigo.
Aquí os dejo la imagen de hoy.
