LAS BATALLITAS

   Buenas tardes a todos, después de la alegría de la llegada del padre de María y el hecho de haber descubierto, que el accidente no había sido nada grave, veamos que nos depara la historia hoy.

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   Al llegar al restaurante, se sentaron en una mesa y pidieron churrasco para comer, a Daniel digamos que tenía ganas de comer algo a la brasa, acompañado claramente de unas patatas fritas y una ensalada, para beber una botella de Tinto Barrantes y para María un refresco. Con el menú estaban todos muy contentos era algo que les encantaba.

   Mientras estaban a la mesa Daniel empezó, como era habitual a contar batallitas del mar;


"Estábamos en los mares del gran sol, como ya sabéis, son unos mares muy tempestuosos, con grandes y altamente peligrosas olas, nosotros estábamos a Capa,para poder protegernos, pero en uno de los golpes tuvimos una avería en la bomba de achique, provocando la imposibilidad de sacar el agua que estaba entrando en el barco, esto hizo que desde el capitán del barco asta el engrasador, nos pusiéramos alerta.Si no eramos capaces de arreglar la bomba de achique, y el agua seguía entrando en el barco, acabaríamos hundiéndonos sin remedio.

Automáticamente, tanto yo, como el segundo y el engrasador nos pusimos manos a la obra, pero si no eran ya pocas las complicaciones, nos vino otro golpe de mar que hizo que la hélice del barco se enredara en los aparejos y a su vez parara el motor completamente, estábamos a la merced del mar, el pánico entre los marineros empezaba a notarse, e incluso nuestro capitán empezaba a preocuparse seriamente, la situación lo requería, como nos diera otro golpe de mar como este podíamos volcar fácilmente.
 
En máquinas estábamos haciendo todo lo posible, pero el barco no ayudaba, la popa del barco cada vez estaba más hundida, y no podíamos hacer más. Desde la cabina de mando, nuestro capitán comenzó  a pedir socorro a tierra, los marineros empezaron a coger los chalecos ante un inminente hundimiento. Medio barco estaba hundido y yo como los otros trabajadores de máquinas teníamos   el agua hasta la cintura, el engrasador de a bordo entró en estado de pánico, quería marchar de su puesto, por lo que tuve que darle un bofetón y un buen grito para que reaccionara, eso fue suficiente, entro en razón, continuando con su labor en la bomba de achique, el segundo y yo estábamos peleando con los motores secundarios para poner en marcha el barco, sabíamos que la hélice estaría inservible, pero queríamos poner en marcha la secundaria, aunque no entendíamos porque no daba arrancado, era un cúmulo de problemas continuos, hasta yo mismo me estaba empezando a rendir.

 El agua seguía subiendo, y eso aun dificultaba más nuestro trabajo, cuando conseguimos que la bomba de achique funcionara, avisamos al capitán, pero no era suficiente, estaba entrando demasiada agua y no daba tiempo para achicarla, necesitábamos un empujón para poder subir y así poder para la entrada del agua en el barco, pero no había forma, los motores secundarios seguían parados."

         - Papa, me estás asustando
         - Tranquila hija mía no te preocupes, solo escucha. (dijo la madre de María)
         - Bueno os dejáis de tanto hablar y me permitís acabar de contar la historia
         - Si papa perdóname

" Otro golpe de mar nos hizo estremecer, pero un extraño ruido en las máquinas nos sorprendió, no podía ser, el último golpe de mar liberó la hélice de su enredo, ocasionando que el motor principal volviera a funcionar, la situación estaba muy complicada, con medio barco hundido, teníamos que darle todo la potencia posible al motor para que nos levantara y así salvar el barco y nuestras vidas.

Hicimos un viejo truco que tanto yo como el segundo de máquinas conocíamos, que incrementaba la potencia del motor durante un breve espacio de tiempo, esperábamos que fuera el tiempo suficiente para sacar el barco del fondo.

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    Y aquí lo dejamos por hoy, mañana tendremos el desenlace de la historia de Daniel, que pasará, saldrán a flote y todos estarán a salvo, habrá algún herido, o tendrán que rescatarlos del mar, mañana lo sabremos. Bueno, ya me despido de todos con la imagen del día, un beso para todos y gracias por perder vuestro valioso tiempo conmigo.